Luego de tener una semana muy agotadora en la empresa donde trabajo, tengo que cumplir con mis otras obligaciones que son mis estudios, que realizo los fines de semana. Como todo estudiante, mi día comienza como cualquier otro ordenando todos los libros y cuadernos que voy a utilizar en el día de clases.
Después preparo la comida que llevo para el compartir que hacemos en la hora del almuerzo. El tiempo es muy importante ya que tengo que estar temprano en clases y no me gusta llegar tarde ni andar con carreras para llegar a la universidad. Los profesores que están comprometidos llegan muy temprano y no es justo que nosotros les hagamos esperar a ellos. Luego el día transcurre entre materia y materia. Nosotros compartiendo vivencias de lo que nos ocurrió en el transcurso de la semana.
Algunos jóvenes no quieren aprovechar las oportunidades que la Misión Sucre les está brindando de terminar una carrera universitaria. Yo sí la estoy aprovechando y disfrutando cada día que asisto a clases.
Más allá de todas las complicaciones que tengamos para asistir a la universidad, hagámoslo como la promesa que nos hicimos de no claudicar en el camino, ni abandonar nuestro compromiso.
Carlos Rosas
Triunfador del 8vo semestre de Comunicación Social
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